Movimiento LGBTI por Geraldine Zamorano Rivera

Cada día y en cada momento llega un nuevo ser a la vida y claramente para sus padres es solo expectativas, el hijo primogénito; la anhelada princesa… todo esperan la sociedad y los padres menos que al crecer ese bebe pueda romper sus creencias en dos: en un antes y en un después. Es normal que estas personas que llegan a sentir cierta atracción por seres de su mismo sexo, al principio crean que están “enfermas” (producto de la misma presión ocasionada por distintos factores) porque lo “normal” en este momento es ver a un hombre y a una mujer juntos, pero cabe mencionar que aquella ideología también se ve afectada por la manera en que la iglesia se involucra, existiendo así muchos estereotipos que la misma religión crea. Y no solo es la iglesia la que interviene, también esta presente la otra cara de la moneda: la sociedad. El rechazo abierto de esta a las manifestaciones públicas de cariño y la discriminación soterrada de la que son objeto estas personas es abrumador. Pero es notorio el enorme engranaje que tienen ambas posiciones ya que de alguna manera la religión siempre se ha vinculado al famoso tipo de “enfermedades de patologías” y han intentado de alguna manera hacer algún tipo de supuesto tratamiento para limpiar a aquellas personas. Verdaderamente creo que la mayoría se han limitado en lo que alguna vez a alguien se le ocurrió decir “esto es lo correcto” y así fuimos enseñados todos. Hace falta una total evolución, y pues bien, los seres humanos y sobre todo en nuestra sociedad estamos acostumbrados a aparentar las cosas Intentando no demostrar que somos seres que vivimos con deseos y necesitamos satisfacernos... Entonces lo que se hace es cohibir que esos deseos existan y poner simplemente unos límites.