ARTÍCULO DE OPINIÓN por Nataly Andrea Peña

Más que respetar una sociedad, se debe respetar una vida y una decisión. Un relación entre dos mujeres o dos hombres puede ser tan común como una relación entre una mujer y un hombre, pero, porque la sociedad rechaza estas decisiones? , Es precisamente porque nuestra realidad no le gusta el cambio o peor aún, no acepta lo que va en contra de lo que supuestamente es lo correcto, una mujer y un hombre. Si opino desde una postura religiosa defendería a las parejas homosexuales desde el punto que Dios nos dice que nos amemos, pero nunca dice que debe ser entre una mujer y un hombre, o bien es el caso de las parejas homosexuales que quieres adoptar un niño o una niña, porque si estas indefensas criaturas no tienen un hogar debemos nosotros (la egoísta sociedad) negarles el derecho a tener uno? Porque si existen PERSONAS dispuestas a brindarles un HOGAR y darles comodidad debemos nosotros (la egoísta sociedad) negarles semejante beneficio? No me parece que estos niños y niñas paguen el precio de una sociedad miedosa y egoísta, debemos darle y permitirle el derecho y deber de formar parte de un hogar verdadero sin importar si en él hay dos madres o dos padres. Digo que es nuestro turno de darle un lugar importante a los cambios, aceptar lo nuevo y lo que nos hace bien. Hay muchos niños esperando la oportunidad de cómo tú, ser parte de un hogar donde le brinden cariño y pueda ser educado, debemos ayudar a que estas personas tildadas como locas tenga la voz suficiente para que la sociedad escuche y les dé una vez más una oportunidad de vivir, no como algunas vez lo aprendieron sino como alguna vez decidieron ser.