viernes, 11 de mayo de 2012

GRAFFITIS, HABLAN LAS IMÁGENES Por: Alejandra Palomino Vivas

Buscando entre la noche, una lisa pared que dentro de su soledad se preste para en la mañana jóvenes cuyos rostros jamás conoceremos, con formas diferentes de pensar, traten de llevar a la gente un mensaje diferente que deseen dejar ver, pero que tan solo unos pocos entiendan, ha algunos les importe y aun así lo discriminen sin importar quizás, que significa y por qué esta ahí, lo increíble es que para lo único que se prestarían estos trazos manipulados por una lata de aerosol, pinceles de diferentes formas y tamaños, es para un reproche como “ ¡Otro rayón mas por la ciudad! ”. ¿Qué? Pero como puedes llamar rayón si tiene forma, si explica algo ¿Será uno más entre tantos de la ciudad? Esto es increíble, llamamos cualquier cosa, a todo lo que desconocemos por que no está aceptado dentro de una sociedad cohibida y obstruida por miles de reglas que quisieran tener sentido, pero tienen solo obligaciones. El graffiti este maravilloso tema que invade miles de sensaciones, que solo logra cautivar a quien puede tener la sensibilidad de imaginar y plasmar no solo en una hoja sino en un lugar mucho más grande que sale desde lo más profundo y limpio del corazón, este es un espacio público, exacto, pero en ningún momento para nadie resulta importante, hasta que lo ven interferido por miles de colores contrastados que se unen para emitir al resto un significado político, social o sociocultural, pero sobre todo un significado que nadie entenderá jamás y es lo que viene de adentro, el poder de tener una pared de 2 metros de alto por 2.5 metros de ancho aproximadamente, esparcir una pintura liquida, difuminar y buscar el tono exacto son cosas que llevan un tiempo, que son imaginadas, proyectadas y luego plasmadas, no son garabatos, tienen alma, cuentan historias, viven por si solos. Ubiquemos tan solo en San Antonio, un lugar de Cali, turístico que permite unir diferentes culturas por su aspecto, justo en toda la esquina, al frente de un restaurante-bar, hay graffitis muy bien elaborados, que dan a esta zona de turismo un ambiente diferente, por que sobresale la perfección de cada trazo y el manejo realizado, es por que sencillamente buscan dar esa sensación de placer, tranquilidad y reflexión estética, cada vez se lográ apreciar que son diferentes los graffitis pues dejarlos seria monótono y un graffiti nunca se convertirá en eso, siempre logrará darnos una mirada diferente, es por eso, que muchas personas al pasar por este lugar, comienzan a caminar mas levemente, a disfrutar de cada uno de los dibujos o letras plasmadas aquí, algunos pensarían que es un desacato “rayar” la pared como popularmente se podría decir, pero ahí quienes les agrada ver que ahí algo más que una pared destrozada o dañada, esta renovada por el color que le ha dado vida y le ha puesto de nuevo en la vista de las personas. Es así como algunos se la pasan buscando las razones para que un grupo de jóvenes tomen como medio de expresión, como una forma de comunicación que no le cierra las puertas ante una sociedad egoísta y conservadora, esta forma libre y cómoda de decir las cosas frenteramente y sin reproches, o quizás también para dar a conocer las pequeños dibujos que un día como si nada se vinieron a la mente de cualquiera de estos chicos(as), razones que por encima, toman por la forma como visten, el hecho de que sea en la noche que pinten las paredes, que no tengan la amabilidad de decirle a mas de 400 millones de personas si podrían pintar justo en esta pared, esto les llena la boca por que son personas que no hayan en este genero urbano una mentalidad artística sino mas bien desocupada que desenfrena su falta de educación y personalidad en el hecho de rayar una pared, pero quizás no se han detenido a pensar o averiguar que la pasión llena también el hecho de pintar e imaginar, alrededor ahí muchas personas que no solo son jóvenes, entre ellos estudiantes y algunos de un buen estrato social, también están universitarios y quizás profesionales, - así pues lográ afírmalo Lukas Jaramillo Escobar un politólogo prestigiado de Bogotá -, que hayan en el graffiti una forma de expresión que pone frente al pueblo a un grupo de rebeldes, rebeldes que si son capaces de hablar por medio de imágenes lo que ellos tratan de callar. Escarbando la historia, que para algunos es un pasado lejano que no debería tocarse, encontramos que es ahí de donde se enriquece esta ingeniosa idea a nuevas tendencias de expresión, desde las antiguas civilizaciones se realizaban signos, símbolos, dibujos, imágenes y marcas por sus pobladores, incluyendo las pinturas rupestres que suelen ser entonces, testimonio de esta viva expresión. Más adelante durante los ochenta y los noventa en los Estados Unidos algunas bandas callejeras e inclusive jóvenes por aparte toman esta manera de expresión para “delimitar territorios” y/o escribir sus nombres utilizando seudónimos para en algunos casos darse a conocer. Así hasta nuestros días ha venido cogiendo impulso y hoy se ha convertido en una expresión artística para muchos jóvenes en varios países. Hoy por hoy todo tiene una historia, “el graffiti es una manifestación artística callejera, urbana, y su soporte forma parte inherente de su expresividad” lo afirma Valentin Justel Tejedor licenciado en Derecho, en su ensayo: ARTE URBANO: EL GRAFFITI quien lográ así mismo acoger y defender la posición de que el graffiti es una arte callejero. Claro! que no se asemeja a las prestigiosas obras de Picasso, como lo puede ser Guernica, una composición a blanco y negro, considerada emblema de su pintura expresionista, que además es un alegato contra la guerra y los bombardeos infligidos a la población civil por Alemania sobre Guernica en el marco de la Guerra Civil Española, pero claró la palabra alegato aquí no representaría nada, y no es reprochada, sino halagadora por que nuestro querido Picasso lográ tener un prestigioso nombramiento mundial y si fuera el quien pintara en una de estas paredes solitarias de nuestra ciudad ¿Habría algún problema?, difícilmente sí, pero seguramente a él le daríamos vía libre para que lo hiciera, pero como no es él sino un joven cuyo emblema de pintura expresionista va hacer “descarada, que rompa la monotonía, que esparza muchos colores, formas, mucha imaginación y que en su esencia misma sea contestatario, reflexivo y espontaneo”, afirma un joven en un especial del Periódico “El Espectador”, la respuesta es un completo rechazo hacia esta nueva tendencia. “Si están peleando es por que lo están viendo” afirma nuevamente este joven. Estos jóvenes dedicados a expresar sus posiciones, se consumen en su labor, pretenden lidiar contra la delincuencia y la violencia que inunda las calles del país, Harnel Molina, líder del grupo de graffiteros que lleva 5 años de conformado ‘Recuperando Espacios Perdidos’ de la Comuna 13, dijo que “buscan desviar la mirada de la contaminación visual y entregar mensajes de reflexión sobre el consumo de cosas innecesarias”, permitiendo entender que ante las miles de propagandas que la politiquería nos ofrece, la cantidad de publicidad que los bares, artistas entre otros nos ponen en postes y paredes deterioradas preferimos esto y no hacemos ningún reclamo mas terminamos leyéndolos y asistiendo a las invitaciones que estos nos hacen pero no tomamos como importante los mensajes que estas expresiones o dibujos, los reconocidos graffitis tienen al momento de salir a la luz pública los cuales no buscan un reconocimiento ante las grandes jerarquías y monopolios, sino en su mismo entorno, ser reconocidos por jóvenes como ellos. No relacionemos expresión con todo lo que veamos por la calle, con un “NO A LA LEY 30” mayúscula, pintada con aerosol negro, frente a la Universidad del Valle o en la Gobernación del Valle, o a los “ SI AL BARETO NO ALVARITO” encontrado por la calle quinta en la Ciudad de Cali, por que esto aunque suelen ser revelaciones no absorben completamente lo que es un graffiti, esté esta hecho para que demuestre un sentimiento que necesita que acuda a una reflexión de la gente y ese es el fin con el que se ha hecho, además de que esta representado por un dibujo y la firma –en algunos casos de su autor- , o simplemente una buena tipografía que para algunos es difícil descubrir y eso la hace diferente, mientras que estas pequeñas frases son pintadas, arrebatos y simples opiniones que se colocan hasta en una ventana, pero que no representan si no la idea desfigurada de protestantes y que se tomaría por vandálico. Esto en su totalidad no llena, y es ahí donde logramos observar su gran diferencia mientras que los dibujos y las tipografías planteadas por muchos de estos chicos se vuelven para algunos un modelo de enriquecimiento para las calles y logran dar otra mirada, las frases colocadas por todos lados no son mas que garabatos hechos a la loca que no cuentan con la especialidad definida de la toma de un color o la manera critica de como se vea. Reposo por último, en la idea de que los graffiteros, estos jóvenes con nuevas ideas y visiones distintas del mundo hallan en una pared la magia de un cantante en sus letras, de un profesor en sus alumnos y de un País en su pueblo. “Ningún gran artista ve las cosas como son en realidad; si lo hiciera, dejaría de ser artista.”, dice Oscar Wilde dramaturgo y novelista. Así es como ahora pienso, cada vez que voy caminando y me encuentro de frente con un graffiti, ya no soy una mas de la sociedad, me he vuelto diferente por que abrí mis ojos ante estos artistas, ahora no canso de hacer preguntas y hasta querer conocer al autor cuando me llama mucho alguna pintura. Ahora el arte, es parte de mi vida por que lo conocí desde la calle y lo encerraron en un museo, quizás así ocurra utópicamente en un futuro, que una pared tan representativa se pueda encerrar en cuatro paredes y abajo se le otorgue un letrero diciendo “Fue una lata de aerosol, un pensamiento urbano y la mano quienes me hicieron y son ustedes quienes me disfrutan”.

1 comentario:

Silvana dijo...

Se presenta con claridad la posición que se defiende en el texto. Tiene buena redacción en el texto, tiene las ideas claras de lo que esta hablando. Contiene argumentos que son fáciles de entender al lector.

Sabe manejar muy bien las palabras para referirse a algo. A veces se confunden un poco las ideas, pero es un buen ensayo.
Utiliza conectores por lo tanto es un ensayo que contiene una posición clara y contundente.

También logra despertar el interés del lector y tiene una organización coherente.

Su calificación es de: 4.0
Revisado por: Silvana