ARTE URBANO por María Del Mar Jiménez Romero

Le preguntas a alguien- ¿te gusta el cantar de los pájaros por la mañana, piensas que es hermoso?- y la persona te contestará probablemente: Sí. Y luego le preguntas -¿Y los entiendes? Y esa persona te dirá: No. Entonces tu le dices: No hace falta entender algo para considerarlo bello. Comenzare definiendo graffiti como la inscripción urbana que corresponde a un mensaje o conjunto de mensajes, filtrados por la marginalidad, el anonimato y la espontaneidad y que en el expresar aquello que comunican violan una prohibición para el respectivo territorio social dentro del cual se manifiesta. De este modo el graffiti corresponde a una escritura de lo prohibido, género de escritura poseído por condiciones de perversión, que precisamente se cualifica entre más logra decir lo indecible en el lugar y ante el sector ciudadano que mantiene tal mensaje como reservado o de prohibida circulación social. Desde sus inicios el mundo del graffiti ha estado rodeado de misterio, preguntas como: ¿Por qué se pinta?, ¿Qué se siente al hacerlo? o ¿qué se quiere expresar con él? Forman parte de las preguntas más corrientes que se hacen entre la gente ajena a este movimiento. Me parece aun escuchar las palabras de personas que dicen: Si un graffiti es arte, ¿Porque no pintan en cuadros? A ver señoras y señores, si los graffitis se pintaran en cuadros se perdería el sentido original del mismo ya que uno de los principales objetivos de este es comunicar a la gente y aportar algo al peatón que pase por donde está hecho. Para sostener esta afirmación traigo a colación a Armando Silva Tellez quien afirma que para que un graffiti pueda llamarse así debe estar acompañado por siete etapas que actúan en su elaboración las cuales son: 1. Marginalidad 2. Anonimato 3. Espontaneidad 4. Escenicidad 5. Precariedad 6. Velocidad 7. Fugacidad. Las tres primeras son pre-operativas existen previamente a la misma inscripción, por lo cual no habrá graffiti si no le antecede el conjunto de las tres condiciones. La marginalidad se refiere a la condición del mensaje de no caber dentro de los circuitos oficiales, por razones ideológicas o simplemente por su privacidad. El anonimato implica una necesaria reserva en la autoría, por lo cual quien hace graffiti actúa, real y simbólicamente enmascarado. La espontaneidad alude a una circunstancia psicológica del graffitero de aprovechar el momento para la elaboración y también al hecho mismo de su escritura que estará marcada por tal espontaneismo. Las siguientes tres etapas se toman como operativas. La escenicidad se refiere a la pared elegida, el diseño escogido, las latas, los materiales y colores utilizados. La velocidad se entiende al mínimo tiempo que se cuenta para su elaboración. La precariedad se entiende como el bajo precio de las pinturas, materiales y todas las actividades que rodean al graffiti donde se cuenta con poco presupuesto pero que a pesar de esto crea un gran impacto en la ciudad. La última valencia corresponde al grupo que Armando Silva Tellez considera como pos-operativo. “La fugacidad actúa una vez y posteriormente a realizada la inscripción se puede considerar como la valencia que asume el control social, pues entre más prohibido sea aquello que exprese; más rápidamente tendrá que borrarse el respectivo mensaje por parte de los individuos que ejerzan tales funciones de control, bien sea la misma policía, (guardias) particulares o la misma ciudadanía que se sienta lesionada o denunciada.” Así, con fugacidad se entiende la corta vida de cada graffiti, el cual puede desaparecer en segundos, ser modificado, o recibir una inmediata y contundente respuesta contraria a su inicial enunciado. Muchas más críticas giran en torno al graffiti en Palabras de Jorge Valencia Rosas Colombiano que hoy radica en USA quien dice que “Hay un graffiti, el original que era una práctica deliciosa, se degeneró y hoy, la mayoría de los escritos en los muros son de pésima calidad, se acabaron las frases creativas, las bonitas, hoy hay paredes sucias. Añoro aquel graffiti que hoy en algunas calles de San Francisco veo, con textos refrescantes. No es que este en contra del graffiti, estoy de acuerdo con el arte callejero, ese que originalmente se llamó Graffiti.... pero no puedo estar de acuerdo con las paredes sucias de todas las grandes ciudades, a paredes sucias me refiero a los escritos con poca elaboración, los que no dicen nada, la verdad no considero que un “te amo” así si mas ni menos sea arte”. ¿Quien estaría de acuerdo con que la “degradación” del graffiti se debe a la corrupción y a la política nefasta que genera la sociedad? Más de una persona estaría a favor, porque es claro que la política en esta época es un componente claro de inconformidad y desigualdad, o cuantos graffitis fueron pintados durante la dichosa reforma a la ley 30 (educación superior) que causó malestar y dejo inquietudes en la comunidad universitaria. Y aunque todos coinciden en que es hora de reformar la norma, existen posiciones del Gobierno y el sector universitario que chocan, a esto se deben los escritos en las paredes que dicen “NO A LA LEY 30”, “EDUCACIÓN GRATUITA” que se ven a lo ancho y largo de la ciudad de Cali pero principalmente a los alrededores de la Universidad del Valle. Muchas personas están en desacuerdo con los constantes alborotos de los estudiantes y con estos escritos pero como dice el que esta ubicado en la calle quinta antes de llegar al centro comercial Cosmocentro en la bomba donde anteriormente quedaba BlockBoster “si el gobierno no nos deja soñar nosotros no los dejamos dormir”, díganme si el gobierno no les presta atención o simplemente para calmarlos decide hacer una reunión con el presidente de estudiantes, “escuchan” sus argumentos y sus posiciones respecto a las diferentes patrañas que los mandatarios quieren hacer con la educación superior, toman nota atenta a sus declaraciones, les dicen que si que en algunas cosas tienen razón, pero todo queda ahí en un papel que se echa al olvido, ¿Cuál es la reacción de los estudiantes que luchan por sus derechos? Por desgracia en Colombia son pocas las personas que piensan y no tragan entero todo lo que dicen los políticos, la corrupción acaba con todo, con el carro, con la casa, con la familia, con el dinero, con la esposa, con el gato y con el perro. Dicen que los que hacen los graffitis son vándalos, son guerrilla urbana, ¿que pueden llegar a comunicar si no saben nada? Entonces como se podrían tildar los ladrones de cuello blanco, ¿cómo guerrilla bien vestida sin pistola, que le saquean los bolsillos disimuladamente y ni cuenta se da? , vándalos los graffiteros ¿Por qué?, ¿por que plasman su pensamiento en la calle?, ¿por qué no tragan entero?, porque quieren que tal vez usted con un pensamiento retrograda en este medio encuentre la forma de quitarse la venda que lo tiene cegado, o porque simplemente quiere que más personas lo vean, este es el error de muchas personas pensar que por qué pinta o tal vez no visten como todo el mundo los graffiteros son ladrones, no tienen sentido común o simplemente van en contra de la sociedad. Es tanta la oposición ante el graffiti que se puede llegar a escuchar que las pinturas tienen muchos químicos que perjudican el medio ambiente, aquí una gran pregunta sería: ¿Qué aporta la gente “común y corriente” a la conservación del medio ambiente? Rima y todo pero la respuesta es clara: NADA. Si piensa lo contrario invito a que analice lo siguiente: no reciclar perjudica al medio ambiente, dejar cargadores conectados sin darle uso afecta al medio ambiente, bañarse 3 veces al día perjudica al medio ambiente, botar basuras a la calle perjudica al medio ambiente, tener más de un celular perjudica al medio ambiente, lavar los platos y no cerrar la llave perjudica al medio ambiente, todo es una cadena. En el mundo libre, los muros servirán para expresarnos. Lógicamente con las responsabilidades de toda índole: Morales, gramaticales de enseñanza, moralejas, contextos, mensajes que aporten y contribuyan cosas buenas a la sociedad. Que el resultado de un graffiti sea agradable y no desagradable, los graffitis desagradables son las paredes sucias que no dicen nada. Mientras la honestidad sea el valor clave de cada graffiti, la pared será un lindo mural, hay paredes grandes y paredes chiquitas, hay frases grandes y frases abreviadas, hay de todo. Hay imaginación y hay talento, mucho talento entre quienes se dedican a dibujar (pintar) en los muros.