martes, 3 de mayo de 2011

CALI ¿CIUDAD TOLERANTE? por Gustavo Restrepo

No es un misterio que desde hace tiempo (hasta llegar a la actualidad) se ha venido presentando fenómenos desastrosos que atentan contra la moral de personas, cuyo pensamiento ha tomado un perspectiva fuera de las masas forjando así diferentes proyectos de vida y cuestionando conceptos tan esenciales para la convivencia en sociedad, como lo es la normalidad refiriéndonos a la estética y comportamiento.
Como siguiente punto, se expondrán diferentes situaciones que envuelven una problemática en común, como se manifiesta y afecta a la estabilidad de una convivencia estable.

En la sociedad podemos ver claramente diversas expresiones de intolerancia que son reflejadas violentamente, arriesgadas y absurdas, sin una argumentación que pueda crear un nuevo postulado de lo que es la verdad. La libertad de expresión, el derecho a la paz y expresarse han sido corrompidos por un genio maligno que no solo quebranta estos conceptos sociales, sino también, el libre albeldrio propio de la naturaleza humana se ve abolido y sacado completamente del contexto. Los principales “causantes” de estas reacciones negativas han sido vistas como minorías que atentan contra la moral y hacen perder el equilibrio de lo establecido en lo social.

Pero ¿por qué se pierde el equilibrio de la convivencia? o podemos preguntarnos mejor, ¿En qué está basado dicho equilibrio? En la ciudad de Cali, como en todo Colombia, se presencia el subdesarrollo, aunque haya cierto avance por cuestiones del tiempo y las actividades políticas, económicas y sociales, se puede ver cierto atraso en la visión con respecto a lo cultural y a la convivencia. Aun vivimos en un país donde las parejas homosexuales son vistas con repulsión y odio, las razas son marginadas, las mujeres no son vistas como un ser capaz al igual de los hombres, personas quienes tomaron la decisión crear a partir de la modificación de su cuerpo se vean incapaces de ser empleados en órganos empresariales o viven en la humillación constante por el hecho de crear un nuevo concepto de lo que es la estética.

Existen personas que aun tienen el pretexto de la decencia y lo que es correcto se basa en lo tradicional, y no ven que los avances con respecto al tiempo, los cambios de pensamiento y formación de la sociedad nos llevan a que una generación no comprende a la siguiente, precisamente por los cambios, manifestando que los valores, los derechos a la libre expresión y planeación de el proyecto de vida de algunos individuos (discriminados) se vean atentados por parte de una sociedad que teme a lo que desconoce y se cierra en la ignorancia. Aquí tiene la razón y tiene voz, voto y oportunidades aquella figura de cabello corto, saco, corbata, sin un desarrollo de criterio que vaya más allá de con lo que fue criado, siendo un robot más, un ejemplar de la falta de expresión particular, un desastre más de la monotonía. Claro que si hacemos un poco de memoria a unos años atrás, podemos recordar alguna que otra enseñanza escolar, de nuestros padres, abuelos o aquella figura de autoridad con la que tuvimos el compartir de enseñanzas e ideas, recordaremos cosas como el respeto es algo que debe aplicarse para quienes son considerados iguales y ejerzan el mismo grado o mayor de respeto; en pocas palabras, “si quiere que lo respeten, respete a los demás”. Muchos de nosotros fuimos criados con postulados como este, donde lo que llegamos a concluir, y si no lo ha hecho querido(a) amigo(a) lo invito a que abra los ojos, que debemos esperar a que nos respeten para respetar, ¿no debería haber respeto siempre aunque no se reciba? ¿Demostrar que es un ser racional y comprende los valores humanos no es lo importante para el desarrollo de su criterio?.
Es un asunto relativo al nivel de educación que reciben las personas, no sólo en las instituciones, sino en su mismo entorno familiar y contexto social. Que aunque existen mínimos que todos deben cumplir, hay muchas personas que por X o Y motivo las aplican o no de manera diferente atentando contra la libertad, la dignidad y el entorno de vida de otras personas. No debe ser interpretado como un valor de dar para recibir, sino una posición de criterio individual y expresarlo sin importar circunstancias en donde este no sea recibido. Parafraseando a Norbert Elias, la civilización establecida con un conjunto de normas para la convivencia basándose en los valores humanos se basa en la educación y los métodos que se usan para llegar a esta y así mantener un nivel estable entre la adaptación de las personas.
Los intentos de incentivar el buen comportamiento, de quienes tienen la concepción tradicional y atentan contra las demás quienes tienen un criterio diferente, que manejan un discurso de expresión y buscan así mismo como darse a expresar manteniendo su libertad en su proyectos de vida con el entorno, y campañas que en el caso de este país han sido bastante deficientes aunque ayudan a unos pocos, son muchos los que todavía no cumplen ni respetan lo que no es o son ellos, no recae en solo la problemática entre los individuos sino en las acciones poco organizadas o realizadas con una menor envergadura por una jerarquía de importancia entre las demás problemáticas a tratar.

3 comentarios:

Adriana dijo...

Comentario realizado por Laura:

Revisión del ensayo “Cali, ciudad tolerante?” Por Gustavo Restrepo

• El autor trata de informarnos acerca de la intolerancia del pueblo frente a los problemas que diariamente afectan nuestra ciudad, criticando tanto la forma tradicional de crianza de sus habitantes, como las estrategias que se emplean para lograr que esta sea una comunidad comprensiva hacia los distintos factores impetuosos.

• A pesar de su opinión el autor necesita tener más claridad en su punto de vista ya que en muchas ocasiones trata de desviarse del tema, debe tener un encadenamiento para que su texto sea más despejado para el lector.

• Sus veredictos aclaran la mala educación que poseemos desde el hogar la cual es generalizada y solo se basa en impresiones personales, debería tener fuentes confiables para reafirmar sus teorías.

• Cuando hace referencia a las estrategias y campañas de educación que se implementan para mejorar la calidad de valores e incentivar un buen comportamiento, lo llama “deficiente” pero a su vez se contradice diciendo que si sirve para algunos pocos.

• Debe organizar mejor sus ideas y los párrafos para que haya un entendimiento total del texto.

NOTA: 3,8

Adriana dijo...

Comentario realizado por María Paula

CALI ¿CIUDAD TOLERANTE? Por Gustavo Restrepo
Revisado por: María Paula González Azcarate (2110263)

El ensayo es bastante interesante, pero considero que faltan citas y textos en donde se apoye el principal problema del ensayo. Me gusta la introducción ya que se plantea una problemática social, una batalla entre la sociedad y la intolerancia que se presenta diariamente en nuestra ciudad.
El autor tiene un lenguaje muy formal, en mi opinión se deberían utilizar palabras y un lenguaje más informal para que el ensayo sea más dinámico y el lector pueda expresar su opinión con relación a este. Las preguntas son muy buenas y cumplen perfectamente su función dentro del ensayo.
La solución planteada por el autor esta algo incompleta, ya que luego de leerlo quedan dudas acerca de cómo solucionar o que hacer al respecto para mejorar esa intolerancia que se menciona.
Nota: 4.0

Adriana dijo...

Comentario escrito por Andrés Felipe

El autor nos informa a veces claramente oras desvaría de la intolerancia que esta ocurriendo en nuestra ciudad.
• Le faltan sitas directas.
• Definir bien las soluciones y su posición.
• La introducción es buena, nos atrae apenas empezamos a leer el ensayo.
• En fin tiene muy buena posición y serie de ideas (no hablo del orden), el ensayo en si es atractivo y envuelve al lector


NOTA: 3.7