El Grafiti POR CRISTIAN MUÑOZ GUZMÁN

¿Acto vandálico?, o ¿arte alternativo?, se han dado muchas concepciones negativas de lo que es el grafiti, pero muchas de ellas no tienen argumentos contundentes de porqué se deberían prohibir, pero, ¿Por qué no aceptamos que puede haber algo más que un lienzo una pintura o una escultura?, Estamos acostumbrados a que nos impongan un estereotipo de lo que debe ser arte, y no optamos por dar a conocer nuestra opinión de lo que para nosotros podría ser algo mas allá de lo que ya esta pre-establecido, subvalorando las nuevas expresiones artísticas.
Arte, ¿Qué es arte? Puede denominarse como cualquier actividad o producto realizado por el hombre con una finalidad estética y comunicativa a través de la cual de expresan ideas, emociones o en general una visión del mundo. Teniendo esta definición bastante literal, ¿por qué el Grafiti no puede ser arte? Si cumple con todos los factores que se requieren para ser arte, entonces ¿es sólo porque es diferente? El minimalismo en la arquitectura es diferente a como era hace varios años y ahora lidera en nuestras edificaciones estructuras y tipos de decoración. Si no es porque es diferente, entonces hay algo mas allá de la exclusión a lo diferente.

En este tiempo de post-modernidad se ha encontrado lo que podría llamarse un nuevo método de libre expresión llamado “Grafiti” y conocido por la sociedad como un acto vandálico, ya que no entienden la diferencia entre el modo de expresar inconformidades y no tienen claro lo que es un acto de vandalismo o aceptado por otros como un arte alternativo, ya que es algo diferente, no solo un lienzo expuesto en un museo o una escultura sino que al ser una obra en la zona urbana, representa algo mas publico algo para todos sin importar edades, cultura, estrato social, niveles de escolaridad, para poder entenderlo y sentirse parte de ello. Los medios de comunicación invaden los espacios públicos con vallas publicitarias, comerciales en la radio y todo esos tipos de formas para hacer propaganda a productos del gobierno en lugar de permitir que ellos ocupen el espacio público con sus anuncios publicitarios, como por ejemplo ofertas en centros comerciales una nueva bebida o cualquier infinidad de objetos que hacen que el consumidor se sienta en la necesidad de obtenerlo, porque cree que así estará conforme en su vida, que por cierto, aumentan el consumismo, lo que no es considerado un enriquecimiento cultural en ningún aspecto. Considero que debe permitírsele a estas personas expresarse con sus obras tan particulares y especiales. Entonces, ¿por qué el Grafiti no puede ser considerado un arte? Si cada grafía está constituida por un simbolismo especial dado por cada grafitero en sus obras, cada grafiti es único porque además de que hay millones de maneras de expresar algo por medio del dibujo, para ellos es algo mas allá de lo les gusta, también grafican sobre lo que no les gusta.
Los grafiteros suelen manifestar los conflictos sociales y la inconformidad con respecto a la manera cómo funciona el gobierno y de cómo hacen cada cosa. Los grafitis pueden ser, entonces, sobre política, y a esta clase se le denomina “Grafiti Leyenda”, y suele ser utilizado por las “pandillas” como marca de territorialidad. También pueden ser religiosos, sobre aspectos sociales o sobre aspectos culturales. Como es sabido, el grafiti es un acto ilegal, pero háganse la pregunta, ¿Qué lleva a estas personas a dejar su huella en un muro sabiendo que lo que hace esta mal? Pues la respuesta está en que, según las entrevistas y experiencias, se dio a conocer que el grafitero logra un nivel de satisfacción muy alto, sabiendo que hace algo malo, algo que es ilegal, se llena de adrenalina, y, que sin esto no sería grafiti. Retomando la forma en que expresan sus inconformidades, el hecho de que lo hagan en lugares públicos recae en que ellos se sienten uno más del pueblo, ni más ni menos que otro ciudadano, por eso no buscan un reconocimiento al hacer sus obras, llaman la atención de una forma PACIFICA, que no contrae problemas colaterales ni desorden público, y lo más importante que no afectan la integridad moral de los que lo ven. Cada uno de nosotros tenemos nuestras formas de expresarnos, en la danza, en un lienzo, en una composición multimedia 3D, con videos o simplemente dialogando, ¿por que ellos no pueden tener su espacio?
Pues esta pregunta, que también ha causado controversia, tiene su inconveniente, y radica en que, hacer un grafiti en un lugar específico con ciertas reglas y vigilado, no les causa emoción y por consiguiente no es grafiti, entonces,
¿Qué solución se podría proponer?, Mi propuesta es, que haya interacción, la mejor manera de entendernos entre nosotros es por medio del dialogo, crear un contacto directo con ellos, y escucharlos que tienen ellos para decir y que tenemos nosotros para decirles, teniendo una posición apta para escuchar y ser escuchados, una buena disposición, crear acuerdos, no un lugar donde ellos hagan sus Grafías, sino otro elemento que afecta mucho, y es la imagen, que la limpieza y el factor estético se vea muchísimo más, que dibujos en las paredes sean algo más que una buena combinación de colores y formas sino un significado profundo y simbólico para la sociedad y que se vea bien, y no involucrar la propiedad privada, nos adentramos en un compromiso que es bastante viable y exequible para ambos protagonistas, la sociedad y los grafiteros.

Conclusión
Se concluye así, que el grafiti está muy subvalorado por la sociedad, y como esta se le dificulta adaptarse a este nuevo tipo de expresión artística, califica este arte como no-arte categorizándolo como un acto de vandalismo. Se considera que por parte de la sociedad no se tiene el conocimiento previo necesario para cuestionar el grafiti.