Cuando se escucha hablar deL termino graffiti, es imposible no opinar sobre él, este término indudablemente ha sido muy controversial desde sus mismos inicios, ya que se expone a la crítica destrucción o admiración. Sería ilógico negar la participación que tiene este fenómeno en la actualidad, sea positiva o negativa, dependiendo de la mirada con la que se analice. Pero creo que antes es necesario que hablemos de la definición de graffiti como categoría artística según la enciclopedia británica: "El uso de la habilidad y la imaginación para crear objetos, entornos o experiencias que se pueden compartir con otras personas" en esta definición podemos observar claramente que no hablan de un espacio en específico en el cual se debe plasmar el grafiti, entonces estarían dándole acceso a la gente hacer de ese arte, un arte callejero, además que el estado no facilita esos espacios de interacción social, de expresión con libertad sin estigmatizar ni catalogarlos como vándalos.
Podemos observar que Julio Cortázar en un fragmento de su relato "Queremos tanto a Glenda" de alguna forma habla sobre la represión de la autoridad hacia estas expresiones, contando como se cerraban a estas situaciones y se limitaban a borrar y en ocasiones a herirlos por sus acciones sin importar quien fuera. Entonces vamos entendiendo como este pensamiento no ha tenido mucho cambio que digamos; nosotros como ciudadanos nos hemos dado cuenta de las algunas injusticias del estado y de la autoridad para con las personas que hacen graffiti, tanto que han llegado a acabar con su vida, entonces entraría a debatir esa posición tan ignorante que tienen estos personajes hacia las diferentes formas de expresión, que pueden llegar hasta ocasionarles daños físicos, por el simple hecho de ser la autoridad y sentirse con el poder de hacerlo.
Es pertinente hacer un breve recuento sobre los inicios de este término, para entrar a analizar su influencia en la sociedad y de esta misma manera tener una posición inteligente hacia este. El espíritu graffiti nace principalmente por esa necesidad de expresar pensamientos guardados y encerrados, poniendo al público la crítica ya sea política, social, cultural etc. El graffiti ha pasado por varias etapas, al principio no buscaban estilos, solo comenzó con los tags, principalmente con el arte de la letra con esa necesidad de marcar territorio y hacerse sentir, luego se fueron creando diferentes formas de expresión urbana mucho más profundas, que se fueron centrando más que todo en el mensaje que llevaba un graffiti como tal, su significado en el contexto social y político. Después comenzamos a ver pintadas mucho más estéticas, abstractas con la necesidad de analizar detenidamente para poder llegar a captar su real mensaje.
Ahora introduzcámonos a la idea del abuso del espacio público, es verdad que en ocasiones, muchos personajes se adueñan de lo público y se sienten con la autoridad de destruirlo y volverlo entonces de su propiedad, rayando por rayar, pero debemos entrar a analizar diferentes situaciones, en las cuales el graffiti nos involucra a todos como sociedad, cuando se protesta por un derecho en común, por algo que de pronto le han arrebatado a unos pocos y aunque no nos afecte directamente, sabemos que es una injusticia y que tenemos el deber como comunidad de mostrar nuestro inconformismo hacia esta. Los muros son del pueblo, de la gente, de los diferentes pensamientos, de los que quieren dejar legado, y no pasar desapercibidos, salir de la masa, por lo menos demostrar que son unos pocos los que no se quedan callados. La discusión eterna de si el graffiti es arte o vandalismo siempre será muy relativa, dependerá del punto de vista de la persona y su grado de importancia hacia los acontecimientos sociales, en ultimas y si este es ilegal no le quita lo artístico, entonces es un circulo sin fin de ideologías contra ideologías y esto es absurdo, Leandri afirmaba: “El graffiti es el grado cero de violencia, el más pequeño vandalismo posible”. Es importante comenzar por definir exactamente lo que es el arte: “El arte es entendido generalmente como cualquier actividad o producto realizado por el ser humano con una finalidad estética o comunicativa, a través del cual se expresan ideas, emociones o, en general, una visión del mundo, mediante diversos recursos, como los plásticos, lingüísticos, sonoros o mixtos. El arte es un componente de la cultura, reflejando en su concepción los sustratos económicos y sociales, y la transmisión de ideas y valores, inherentes a cualquier cultura humana a lo largo del espacio y el tiempo”. Esta definición es demasiado clara, podemos ir observando que el arte no se cataloga por lugar, ni momento, ni material, es simplemente la necesidad que tenemos como seres humanos de expresar nuestras emociones de alguna forma, contando con una estética y esas ganas de comunicarnos con el mundo, dejando legado de nuestros pensamientos y emociones más profundas, ahora es importante resaltar entonces que el graffiti si estaría catalogado en el ámbito del arte, porque cumple con estas características como lo son, lo estético en ocasiones, lo comunicativo que es esencial en la idea de graffiti, la necesidad de expresar ideas o emociones, con diferentes visiones del mundo etc. El graffiti se impone en las calles, se da un lugar sin pedir permiso, habla lo que muchos se guardan y no le importa las consecuencias, pero la simple valentina y la capacidad de expresar una inconformidad, una idea, le da una característica meramente artística.
Creo que el graffiti es una de las mejores formas de expresión artística principalmente por su espíritu de comunicación masiva, de crítica y análisis de un contexto en el que se encuentra una sociedad, pero es importante aclarar que no toda expresión en una pared puede ser clasificada como graffiti, para mí el graffiti debe tener una característica estética y también de la profundidad del mensaje que contiene dependiendo de cómo sea leida la situación que se viva en ese momento, entonces es una expresión que necesita de un análisis detenido para llegar a comprenderlo en todos sus aspectos. El graffiti nos involucra a todos, es un arte que no clasifica ni cataloga, que va más allá de lo que podemos ver a simple vista y que tenemos que entrar a analizar para comprender su verdadero mensaje, por lo tanto su verdadera esencia. Todos estamos expuestos al graffiti, pero no todos lo tomamos de la misma forma, porque quizá no nos detenemos a admirar lo que puede llegar a expresar el mensaje graffiti, esto demuestra que seguimos cegados por el conformismo, que de verdad no nos interesa la situación ya sea política, social, económica, cultural etc, ni opinar sobre esta, y no nos involucramos, cuando nos afecta a todos ya sea directa o indirectamente. El graffiti elimina todo tipo de protocolo en el arte, como el arte encerrado en un museo, dándole un sentido distinto a la categoría de arte como tal, eliminando la idea de convertirlo en algo privilegiado al que no todos pueden acceder, cuando el arte debe ir ligado a la exposición como tal, a la masa, a los ricos y a los pobres, a los feos y a los lindos, en definición, expuesta para todos, el arte no puede llegar a convertirse en un negocio, el sentido del arte principalmente es expresar por medio de él eso que sentimos, eso que nos hace sentir vivos, que nos hace humanos, eso que necesitamos sacar a flote y plasmarlo en algún lugar y compartirlo con una sociedad. ¿Qué más que tener el arte en nuestra ciudad?, a la vista y a la crítica de todos, con la posibilidad de destruirlo o admirarlo, el graffiti expresa lo que quizá muchos callan y otros sienten la necesidad y la valentía de protestar por medio de los muros urbanos. No podemos ignorar quien habla por nosotros, quien se pone en los zapatos de los ciudadanos y protesta por todos, mucho menos podemos ignorar el mensaje que hay en la profundidad de esta expresión, porque muchas veces dejamos el espíritu graffiti atrapado en un muro, no le damos la posibilidad a esa idea de salir a mostrar lo que está allí plasmado, deberíamos tomarnos un momento y analizar nuestra situación en el contexto social y darnos cuenta, que si el graffiti está expuesto en lo público, es porque realmente esa idea y ese fin nos pertenece a todos, pero nos limitamos a ignorar lo que no conocemos, y no nos damos el gusto de ir más allá de buscar por qué y más que todo el para que de las cosas. Y entonces ¿porque el graffiti para mí no es vandalismo? Porque simplemente nos da la posibilidad a todas las personas de participar en el de cualquier forma, es la sociedad su principal espectadora con el fin de protestar por algo que nos pertenece a todos, dándole color a la ciudad y lo más importante dándole alma y personalidad a un muro, dándole VIDA, no le hace daño a nadie, simplemente habla por quienes no se atreven hacerlo.
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