EL GRAFFITI Por Sergio Andrés Velásquez

A través de todos los tiempos han existido inconformidades de muchas personas hacia sus gobernantes, sus políticas de estado y en fin a una serie de situaciones que de una u otra manera les afectan. Uno de los medios más utilizados para expresarlas sin temor a ser sancionados ha sido el graffiti
La palabra graffiti se relaciona con la idea de grafito o de expresión gráfica, en su mayoría el grafiti no sigue las reglas artísticas más que la misma libertad de expresión del autor, es por eso que mientras unos son realmente complejos y verdaderamente obras de arte otros son simples frases escritas con cierta violencia en las paredes de casas, muros de la calle etc... No es graffiti rayar por rayar una pared solo con el fin de dañar la propiedad pública o privada; hay quienes señalan este tipo de comunicación y expresión como signo de reveldia, otros como una forma de hacer arte. Para hacer un graffiti debe ser planeado con anterioridad, que exprese lo que el graffitero siente frente a algo y que este llame la atención de la sociedad como lo dice el personaje de la entrevista realizada en el puente de los Mil días en Santiago de Cali (IDENTIFICAR AL ENTREVISTADO).

Mi posición frente a este tipo de expresión es de defensa, porque respeto y valoro el sentir de las personas que manifiestan el deseo de expresarse, sea cual sea la forma, porque es un derecho fundamental y ante todo porque en los graffitis se expresa lo que mucha gente caya o no puede decir a toda una sociedad en general.
Así como grandes artistas reconocidos y expertos catalogan el graffiti como arte, también hay otras personas que no lo consideran un arte sino un vandalismo, argumentan esto porque están en desacuerdo de que se rayen las paredes de la ciudad tanto como en las zonas públicas como las privadas. Dicen que eso solo lo hacen los “vándalos”, que el graffiti “daña la ciudad” y que los lugares donde se realiza la actividad del graffiti son frecuentados en su mayoría por marihuaneros, ladrones y locos de la calle. Esto crea una gran polémica llevándonos a preguntar ¿Cuál sería entonces la solución?.

Cantidad de ciudadanos se muestran enfadados cuando rayan las paredes de sus propiedades con simples garabatos, las personas que hacen esto sin ningún fin, solo con el de dañar las cosas a estos si se les puede llamar vándalos.
Varios autores han establecido nexos de unión entre el graffiti y algunos momentos de la historia del arte como las pinturas rupestres, los jeroglíficos las pinturas de las catatumbas paleocristianas o la pintura mural como aparece en el texto Diálogos Sobre los Muros. Estoy de acuerdo con esto porque por medio de esas escrituras antiguas en las paredes hemos podido ver lo que pensaban, la forma en que representaba y como veían el mundo nuestros ancestros a través de la historia, ¿Qué hubiera sucedido si no hubieran existido las pinturas rupestres, jeroglíficos, etc.? ¿Habría comunicación? (BUENA PREGUNTA HACER PENSAR AL LECTOR)

Estas manifestaciones rupestres fueron quizá una de las primeras formas de comunicación y que aún perduran como fuente de información para los investigadores quienes al interpretarlas nos dan cuentan de las grandiosas historias de los antepasados. Es por eso que el graffitit se puede decir que es cultural porque se ha transmitido de generación en generación, desde la antigüedad hasta nuestros días.
Sin embargo hay muchas personas que desconocen del tema y son ignorantes frente a este y critican sin saber que los verdaderos graffiteros son capaces de expresar su inconformidad frente a algún tema, así les toque hacerlo sin que los vean pero lo hacen; no como otros que simplemente no dicen nada, pueden estar conformes e inconformes pero no tienen los pantalones bien puestos para decir lo que sienten.
Un buen graffiti es un método de protesta bien ilustrada, sin ser tan duro como insultar a quien se refiere el desacuerdo y sin ser tan suave como para no persuadir a quien lo ve.


Volviendo a la problemática, el graffiti en la mayoría de ciudades es visto como un acto ilegal porque causa daño a la propiedad, crea un entorno desagradable, etc., es lo que manifiestan algunas personas que no están de acuerdo.
Para mí por el contrario; si se realiza en un sitio que no indispone a nadie como por ejemplo en un puente peatonal o vehicular, tal como sucede en varios sitios de la ciudad de Cali, pienso que son los más apropiados para lo que el graffitero desea conseguir: que sean impactantes y llamativos a la hora de que quien se vaya movilizando obligadamente los mire, los lea o capte la idea de lo que quiere significar.

Para concluir, puedo decir que nadie es tan pequeño para ser ignorado en una sociedad. Las personas deberíamos de mirar el graffiti de forma más constructiva, de ponernos en los zapatos de quienes manifiestan estas formas, al contrario, es un medio del cual podemos echar mano para hacer otras construcciones tales como las de algunas publicidades pero en forma de graffiti.
Está comprobado actualmente que el graffiti por ser una expresión corta, colorida y llamativa llega de inmediato a los receptores, impacta, queda en su memoria y es tan así que muchas personas se apropian de estos para llevar mensajes a otros. Un ejemplo típico es el caso de algunos docentes, que piden a sus estudiantes en su materia la elaboración de graffitis creados por ellos en un tema específico; con esto estoy corroborando que el graffiti sea cual sea la idea de las personas es útil y de gran importancia.