¿Para qué un hombre?, si no sirven para nada, son una carga, sólo son buenos para tener sexo y eso, yo soy una mujer fuerte, inteligente, independiente, segura de mi misma, con un trabajo fijo, salgo cuando quiero, y con quien quiero, tengo 34 años, estoy en la flor de mi juventud, y siendo sincera considero que el feminismo resultó volcándose contra las mujeres, que bobada, ahora toca trabajar mucho más duro que los hombres que no son más que unos perezosos, además de trabajar, toca hacer las veces de ama de casa, porque esos vagos no son capaces de ayudar con nada, parece que le tuvieran miedo a las escobas, y es que las mujeres no somos iguales a ellos, somos mejores, somos nosotras las que debemos direccionar esta sociedad, por lo menos las mujeres como yo, que tenemos las enaguas bien puestas, los hombres ya tuvieron su oportunidad, y la embarraron, ahora somos nosotras quienes diremos qué hacer, cuándo, cómo y porqué.
Al parecer aquellas que se han convertido al Hembrismo, han decidido olvidar el modelo de sociedad por el cual lucharon grandes mujeres al iniciar el movimiento feminista. Parece que este movimiento ha decidido dar la espalda al ideal de una sociedad igualitaria, llena de oportunidades para todos sin importar raza, físico, nacionalidad, o género, las hembristas (sin temor a equivocarme) han olvidado que la verdadera razón de ser del feminismo, no era poco a poco abrir paso a lo que según mi concepto pretende convertirse en una venganza dirigida por la ley del talión.
Después de todas las luchas, los logros y avances alcanzados por el feminismo, se podría creer que la utopía de una sociedad donde todos nos sintamos bien y parte de, es una realidad, ya que sería injustificable devolvernos a esa jerarquización del poder debido al género; bastante injusto es exponer a las futuras generaciones a una “guerra de sexos” que resulta siendo a mi concepto una “guerra de egos”, donde no existirá un verdadero ganador. No será posible construir una sociedad digna y respetuosa, sino dejamos de humillarnos y menospreciarnos los unos a los otros.
Es apenas natural que nos sensibilicemos al escuchar la historia de aquellas mujeres víctimas de maltrato físico, verbal y psicológico a causa del machismo, la intolerancia y la falta de educación de algunos hombres e incluso de algunas mujeres, aún más, sabiendo que a pesar de todos estos años de lucha por la igualdad y el respeto mutuo, el “feminicidio” sigue prendiendo las alarmas en nuestro país. Y le pregunto, ¿Cuán fuerte sería la desesperación, impotencia y el dolor que usted sentiría si su hija, hermana, madre o amiga fuera uno de los 1.424 casos de feminicidios reportados en el país en el año 2011? , o una de las 1.146 las mujeres asesinadas, en el 2012, un estudio realizado (el mismo año) por la OPS (Organización Panamericana de Salud) reveló que Colombia con un 37,9% es el segundo país más afectado con mujeres víctimas de maltrato intrafamiliar . Las cifras son indignantes, sobre todo cuando muchos de estos casos quedan en la impunidad. Pero cabe preguntarnos mujeres divinas, si los ideales revanchistas que plantea el Hembrismo son el camino a seguir, preciso es recordar que como decían los viejos, “a veces la mejor forma de vengarse de un malvado es no parecerse a él”.
¿Qué podríamos ganar al construir un movimiento que como el machismo no hará más que dejar dolor a su paso? ¿Será que devolviendo humillaciones y golpes, se secaran las lágrimas de aquellas víctimas de estos atropellos? Yo creo que no y a decir verdad me parece una necedad pensar lo contrario.
Quizás, mujeres divinas, no han considerado que como nos da a entender Enrique Serna en su ensayo Hembrismo, crear nuevas formas de opresión empañará la nada pequeña hazaña alcanzada por el feminismo: la liberación femenina, que en palabras del autor, ha hecho de este mundo un lugar más habitable y con mejores condiciones no sólo para las mujeres sino para los hombres inteligentes.
La idea no es pasar de oprimidas a opresoras, es abrir espacios que nos permitan construir una sociedad de igualdad, ya el machismo se encargó de manchar con golpes, lágrimas, y tragedias la historia de la humanidad, no es justo y menos necesario exponernos a un sufrimiento semejante. No hablo de olvidar (eso sólo nos condena a repetir la historia) pero sí es tiempo de perdonar, dejar que sanen las heridas y pensar con claridad.
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Las leyes para el feminicidio no son suficientes en el país-Universidad Nacional de Colombia (http://www.agenciadenoticias.unal.edu.co/ndetalle/article/las-leyes-para-el-feminicidio-no-son-suficientes-en-el-pais.html)
Colprensa Mayo 19 de 2013 – Periódico El universal (http://www.eluniversal.com.co/cartagena/nacional/en-2012-1146-mujeres-fueron-victimas-del-feminicidio-en-colombia-120068)
Artículo: Hembrismo. Por: Enrique Serna
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