MARCELA PALACIOS
Entre lo legal y lo ilegal, entre aerógrafos de muchos colores, plantillas, técnicas, experiencias, ideales y mucha creatividad, se crean numerosos mensajes en lienzos enormes de diversos tamaños, texturas y formas proyectándose como una galería de arte en lo urbano que busca mostrar el reflejo de una sociedad. Vandalismo, lo llaman algunos. El graffiti toma forma como una imagen fija llena de vida que ha sufrido la incomprensión de la época mostrándolo como algo descontextualizado perdiendo su espíritu transgresor que roza en ocasiones la ilegalidad; pero pese a esto, de este movimiento artístico callejero han surgido grandes artistas y son muchos los que a nivel mundial se dedican profesionalmente a ello.
Lo que es el graffiti y lo que este representa en la sociedad es un punto de partida, aunque no todo lo que se plasma en estos enormes lienzos urbanos, es graffiti, existe línea muy fina en lo que es la publicidad y lo netamente graffiti. La realidad es que a las personas nos bombardean todo el tiempo con informaciones ilustradas en la calle, nos llenan de ideas, sin siquiera ver el trasfondo de cada mensaje, estamos tan llenos de consumismo que cogemos siempre lo que nos interesa y lo acomodamos a nuestro favor; y lo destacable es que toda esa información la manejamos como si fuese un graffiti. “Mientras el graffiti busca impactar racional o afectivamente, para generar dudas y sospechas respecto a lo establecido dentro de las fronteras de un territorio, la publicidad pretende, especialmente con recursos emotivos, el consumo de un producto o imagen(…)” según Armando Silva Téllez en su artículo El graffiti en la ciudad.
Detrás de cierto grado de protesta , de una historia interesante y de tantas formas, líneas, letras, colores y mensajes existe muchos conceptos y significados a lo que es el graffiti, pero lo cierto es que gracias a una carencia de información ,las personas tienden a tomar un significado negativo catalogándolo como un movimiento de vandalismo, degradante para la sociedad; el graffiti es un movimiento de expresión artística de la calle, son ilustraciones que reflejan a toda una sociedad con contenidos políticos y sociales.
La historia del graffiti empieza a finales de los sesenta en Nueva York con toda una cultura callejera envuelta en hip hop quienes firmaban en lugares de gran inestabilidad social; donde paredes, edificios e incluso vagones del metro eran ilustradas con lemas de sentido político en la gran mayoría de los casos reflejaban una realidad en un político social que se vivía. Estos autores grafiteros con el pasar del tiempo, evolucionaron en su técnica y temática provocando la consolidación de una nueva expresión artística que retomaba la pared y lo reconvertía en el canal de comunicación de un nuevo modo de arte gráfico que ya se alejaba de sus orígenes de rebeldía y autoafirmación. El hecho de que ellos usen un espacio público que es de todos, conlleva a muchas confrontaciones, pues hay quienes piensan que esa clase de expresión degrada a la ciudad y hay quienes defienden y aceptan lo que ven representado; los graffiteros usan el espacio público simplemente porque ese es su medio para llegar a las personas, para transmitir un mensaje a toda la sociedad, por que en los mensajes ellos pretenden dar a entender y representar la situación actual en la vida de la sociedad, ellos quieren ser escuchados de alguna manera, y su estrategia es ser escuchados por medio de lo visual; un juego entre colores, formas, y una realidad. El que afecte o no a la sociedad, depende del individuo y el cómo tome el mensaje.
Según el artículo de El graffiti desde los grafiteros, por Melissa Solórzano García estudiante de comunicación, nombra al graffiiti y a los graffiteros como un arte plasmado, en donde el graffitero solo quiere dar a conocer su arte, no importa el medio, si es con una brocha o una lata de aerosol. Son artistas que quieren hacer una carrera de su profesión; con deseos de pintar donde sea y sin muchas limitaciones. Lamentable mente no muchas personas piensan de igual forma, pues el graffiti es considerado normalmente como algo degradante en la sociedad, que le quita estética.
El mundo está sujeto por defensores y contrarios, el graffiti no se queda a tras, definitivamente este arte de la calle no es bien acogido por ciertas personas que piensan de forma vandálica sobre el graffiti, pero también hay quienes lo defienden y no le ven problema alguno, siempre y cuando la intensión si sea la de un graffiti, ya que existe lo que sí es y lo que no es. Lo cierto es que las personas se rigen más que todo en un orden ya establecido en la sociedad y al ver estas ilustraciones en las calles, genera gran controversia en aquellas personas haciendo que para ellas, eso no sea una forma de expresión, sino más bien un atentado contra la ciudad; sin embargo, no se dan cuenta de todo el trasfondo que los graffities quieren dar a entender, y esas personas no entienden que el graffiti es el medio más importantes para los graffiteros al momento de dar a conocer un mensaje. En cierta forma los que piensan que el graffiti son actos exclusivamente vandálicos, no quedan ajenos a decir que las personas que los ejercen, son sujetos que están envueltos en una cultura demacrada y violenta, llena de maldad y vicios, “Debemos romper mitos sociales. El gran mito es que los chicos de las colonias populares son únicamente delincuentes, drogadictos, malvivientes, destructores de los procesos sociales”. Menciona Saltillo en su artículo sobre El graffiti debe ser reconocido por la sociedad.
La esencia del graffiti no es dañar el espacio público, ni tampoco degradar a toda una sociedad, lo que pretenden los graffiteros con los graffitis es dar a entender una realidad que nos toca a todos por medio de mensajes; otra punto por destacar, es que el graffiti por ser expresión, pasa a ser catalogado por un arte, un arte urbano que expresa mas de mil palabras, mas de mil significados, no solo expresa los mensajes escritos o plasmados, sino que también refleja toda una conciencia y emoción por parte del graffitero y es que al parecer hay personas que no entienden que el arte tiene que estar en la calle, a cualquier nivel y a la vista de todos.La calle necesita expresarse, mutar, respirar y reinventarse en cada momento y así lo hace, aunque no siempre en la dirección adecuada. Pues depende del graffiti y de cómo sea visto por la sociedad.
Entre lo legal y lo ilegal, entre aerógrafos de muchos colores, plantillas, técnicas, experiencias, ideales y mucha creatividad, se crean numerosos mensajes en lienzos enormes de diversos tamaños, texturas y formas proyectándose como una galería de arte en lo urbano que busca mostrar el reflejo de una sociedad. Vandalismo, lo llaman algunos. El graffiti toma forma como una imagen fija llena de vida que ha sufrido la incomprensión de la época mostrándolo como algo descontextualizado perdiendo su espíritu transgresor que roza en ocasiones la ilegalidad; pero pese a esto, de este movimiento artístico callejero han surgido grandes artistas y son muchos los que a nivel mundial se dedican profesionalmente a ello.
Lo que es el graffiti y lo que este representa en la sociedad es un punto de partida, aunque no todo lo que se plasma en estos enormes lienzos urbanos, es graffiti, existe línea muy fina en lo que es la publicidad y lo netamente graffiti. La realidad es que a las personas nos bombardean todo el tiempo con informaciones ilustradas en la calle, nos llenan de ideas, sin siquiera ver el trasfondo de cada mensaje, estamos tan llenos de consumismo que cogemos siempre lo que nos interesa y lo acomodamos a nuestro favor; y lo destacable es que toda esa información la manejamos como si fuese un graffiti. “Mientras el graffiti busca impactar racional o afectivamente, para generar dudas y sospechas respecto a lo establecido dentro de las fronteras de un territorio, la publicidad pretende, especialmente con recursos emotivos, el consumo de un producto o imagen(…)” según Armando Silva Téllez en su artículo El graffiti en la ciudad.
Detrás de cierto grado de protesta , de una historia interesante y de tantas formas, líneas, letras, colores y mensajes existe muchos conceptos y significados a lo que es el graffiti, pero lo cierto es que gracias a una carencia de información ,las personas tienden a tomar un significado negativo catalogándolo como un movimiento de vandalismo, degradante para la sociedad; el graffiti es un movimiento de expresión artística de la calle, son ilustraciones que reflejan a toda una sociedad con contenidos políticos y sociales.
La historia del graffiti empieza a finales de los sesenta en Nueva York con toda una cultura callejera envuelta en hip hop quienes firmaban en lugares de gran inestabilidad social; donde paredes, edificios e incluso vagones del metro eran ilustradas con lemas de sentido político en la gran mayoría de los casos reflejaban una realidad en un político social que se vivía. Estos autores grafiteros con el pasar del tiempo, evolucionaron en su técnica y temática provocando la consolidación de una nueva expresión artística que retomaba la pared y lo reconvertía en el canal de comunicación de un nuevo modo de arte gráfico que ya se alejaba de sus orígenes de rebeldía y autoafirmación. El hecho de que ellos usen un espacio público que es de todos, conlleva a muchas confrontaciones, pues hay quienes piensan que esa clase de expresión degrada a la ciudad y hay quienes defienden y aceptan lo que ven representado; los graffiteros usan el espacio público simplemente porque ese es su medio para llegar a las personas, para transmitir un mensaje a toda la sociedad, por que en los mensajes ellos pretenden dar a entender y representar la situación actual en la vida de la sociedad, ellos quieren ser escuchados de alguna manera, y su estrategia es ser escuchados por medio de lo visual; un juego entre colores, formas, y una realidad. El que afecte o no a la sociedad, depende del individuo y el cómo tome el mensaje.
Según el artículo de El graffiti desde los grafiteros, por Melissa Solórzano García estudiante de comunicación, nombra al graffiiti y a los graffiteros como un arte plasmado, en donde el graffitero solo quiere dar a conocer su arte, no importa el medio, si es con una brocha o una lata de aerosol. Son artistas que quieren hacer una carrera de su profesión; con deseos de pintar donde sea y sin muchas limitaciones. Lamentable mente no muchas personas piensan de igual forma, pues el graffiti es considerado normalmente como algo degradante en la sociedad, que le quita estética.
El mundo está sujeto por defensores y contrarios, el graffiti no se queda a tras, definitivamente este arte de la calle no es bien acogido por ciertas personas que piensan de forma vandálica sobre el graffiti, pero también hay quienes lo defienden y no le ven problema alguno, siempre y cuando la intensión si sea la de un graffiti, ya que existe lo que sí es y lo que no es. Lo cierto es que las personas se rigen más que todo en un orden ya establecido en la sociedad y al ver estas ilustraciones en las calles, genera gran controversia en aquellas personas haciendo que para ellas, eso no sea una forma de expresión, sino más bien un atentado contra la ciudad; sin embargo, no se dan cuenta de todo el trasfondo que los graffities quieren dar a entender, y esas personas no entienden que el graffiti es el medio más importantes para los graffiteros al momento de dar a conocer un mensaje. En cierta forma los que piensan que el graffiti son actos exclusivamente vandálicos, no quedan ajenos a decir que las personas que los ejercen, son sujetos que están envueltos en una cultura demacrada y violenta, llena de maldad y vicios, “Debemos romper mitos sociales. El gran mito es que los chicos de las colonias populares son únicamente delincuentes, drogadictos, malvivientes, destructores de los procesos sociales”. Menciona Saltillo en su artículo sobre El graffiti debe ser reconocido por la sociedad.
La esencia del graffiti no es dañar el espacio público, ni tampoco degradar a toda una sociedad, lo que pretenden los graffiteros con los graffitis es dar a entender una realidad que nos toca a todos por medio de mensajes; otra punto por destacar, es que el graffiti por ser expresión, pasa a ser catalogado por un arte, un arte urbano que expresa mas de mil palabras, mas de mil significados, no solo expresa los mensajes escritos o plasmados, sino que también refleja toda una conciencia y emoción por parte del graffitero y es que al parecer hay personas que no entienden que el arte tiene que estar en la calle, a cualquier nivel y a la vista de todos.La calle necesita expresarse, mutar, respirar y reinventarse en cada momento y así lo hace, aunque no siempre en la dirección adecuada. Pues depende del graffiti y de cómo sea visto por la sociedad.
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